Oratoria de semana santa en Senés
oratoria de viernes santo
El jueves, hasta mediodía, se iba al campo acoger hierba para los animales. Por la tarde, íbamos todos a los oficios, se conmemoraba el Lavatorio. El viernes santo, el Sacerdote decía el sermón de las siete palabras, algunos hacían un verdadero alarde de oratoria y de llegar a las más recónditas mío fibrillas de los sentimientos humanos.
Viernes Santo ¡Que dolor! expiro crucificado crucificado cristo nuestro nuestro redentor, más antes dijo angustiado siete palabras de amor.
la primera fue rogar por sus propios enemigos, oh caridad singular, que a cuantos fueron testigos, mucho les hizo admirar,
la segunda, un ladrón hizo su petición eficaz, y cristo le satisfizo seras diciéndole..hoy seras conmigo en el paraíso.
A su madre la tercera palabra dirigió diciéndole recibiera por hijo a Juan, y añadió, que él por Madre la tuviera.
La cuarta a su padre amado dirige su afecto. Viéndose tan angustiado ¡Dios mío! Dice al Eterno ¿Por qué me has desanmparado?
La quinta, estando sediento por haberse desangrado, dice sin aliento. ¡Sed tengo! y allí le han dado hiel y vinagre al momento.
La sexta, viendo acabado y plenamente cumplido todo lo profetizado, dice muy enternecido: ¡Ya está todo consumado!
La séptima con fervor su Espíritu entrega, en manos de su Padre con amor, de esta manera cristiana murió nuestro Redentor.
Información de Juan Egea Golbano
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